¡Feliz Sant Jordi!

Aunque este año no se celebre oficialmente por motivos sobradamente conocidos, Sant Jordi, sus rosas, sus libros y la animación de todas las calles de Catalunya está fijado en nuestra memoria colectiva. Si hacemos un ejercicio de visualización, podremos ver las calles abarrotadas de gente sonriendo a la primavera, podremos oler a rosas y a libro nuevo, escucharemos el bullicio de un día de Fiesta, de la fiesta más bonita de todas las fiestas. Hoy, desde casa, tenemos la oportunidad de revivir nuestro Sant jordi y de valorarlo más que nunca, como estamos aprendiendo durante todos estos días a valorar las pequeñas cosas que creíamos que estarían ahí para siempre y que esta pandemia nos está demostrando que nada es para siempre. Valoremos día a día lo que tenemos. Agradezcamos día a día, quizás mañana sea demasiado tarde.

También hoy podemos montarnos nuestro Sant Jordi en casa. Pintemos rosas, hagamoslas de papel, buen ejercicio para entretener a los peques. Rebusquemos en la librería, seguro que encontramos algún libro, aun con precinto que dejamos para más adelante y que nuestra pareja ni siquiera recuerda.

A mi me gustaría haceros un regalo muy especial: la rosa y el libro que acompañan este texto. Se trata de un diseño del pasado Sant Jordi de mi querido amigo Valeri. Valeri se marchó en verano pero nos dejó una colección de maravillosos recuerdos y esta preciosa rosa-libro.

¡Feliz Sant Jordi!